Los trastornos alimentarios como la anorexia y la bulimia nerviosa son enfermedades muy complejas que requieren una cantidad significativa de tiempo para tratar y curar. Ningún individuo desarrolló su trastorno alimentario durante la noche, por lo tanto, no desaparecerá tan rápidamente. Es esencial tener en cuenta que la recuperación de nadie es perfecta; resbalones y recaídas son extremadamente comunes.
A continuación se muestra un plan de prevención diseñado para ayudar a un individuo en las recaídas.
1) Comienza por crear una lista de los comportamientos y mecanismos de adaptación que han sido beneficiosos en tu proceso de recuperación. Por ejemplo: comer comidas regulares, escribir un registro de alimentos, planificar comidas y refrigerios, o actividades de cuidado personal. Es fundamental mantener estos comportamientos y estrategias en mente y poder volver a ellos con el trastorno alimentario que parece fortalecerse.
2) En segundo lugar, crea una lista de factores desencadenantes que pueden aumentar las posibilidades de recaídas y resbalones.
You can use these examples or write your own triggers that can increase your chance of relapse
Ser capaz de reconocer los primeros signos de recaída:
Elije al menos 5 signos de advertencia posibles que se apliquen a ti, y para cada uno escribe al menos una forma de lidiar con esa señal de advertencia para combatir el trastorno alimentario y retomar el camino.
En tiempos difíciles, puede ser difícil recordar los mecanismos de afrontamiento sanos. Muchas personas que sufren crisis se basan en comportamientos poco saludables. Elaborar un plan por adelantado ayuda a encontrar mejores formas de enfrentar el problema en lugar de volver a referirse al trastorno alimentario. Crea una lista de 10 comportamientos saludables y guárdalo en un lugar visible y accesible, por ejemplo, un refrigerador.
Es crucial pedir ayuda en tiempos de crisis. Hablar de tus sentimientos puede ayudar a aliviar la ansiedad y la depresión. Llegar al exterior no solo proporciona un lugar seguro para evitar resbalones o recaídas, sino que recuerdas que NO está solo. Haz una lista de nombres de las personas a las que puedes pedirle ayuda; ¡cuándo más preguntas, más fácil se vuelve! La persona estará más que feliz de que hayas buscado ayuda y con mucho gusto estará a tu disposición lo mejor que puedan.
Con la recuperación, no siempre es posible prevenir resbalones o recaídas. La mayoría de la gente tiende a ser dura por sí misma si no puede recuperarse "perfectamente". Solo como recordatorio, un mal día no significa que eres un fracaso. Perdónate y continúa avanzando en tu viaje de recuperación. Aprende de tus lapsos sin darte golpes. Los resbalones y las recaídas son muy comunes en la recuperación y pueden ser beneficiosos para aprender de ellos si se interpretan correctamente. Mantente fuerte, para obtener esa libertad que tu desorden alimenticio te robó.
Expectativas:
Realidad:
Use el siguiente gráfico para ayudarlo a comprender mejor el proceso de recuperación: